A medida que el cuerpo envejece, con el tiempo experimenta el deterioro de las funciones fisiológicas. Esto incluye la habilidad de producir glutatión, que comienza con una disminución gradual y se agrava con el tiempo.
Esta disminución de la insuficiencia se ve agravada por enfermedades, exposición a toxinas ambientales y estrés, todo lo cual agota aún más el nivel de glutatión.
Además, algunas personas pueden experimentar una incapacidad genética para producir niveles suficientes de glutatión. Aquellos que sufren esta deficiencia natural corren aún más riesgo de una rápida disminución en la producción de glutatión.
Medios de Suplementación
La pregunta es: ¿cómo se pueden elevar los niveles de glutatión de manera efectiva para combatir este eventual agotamiento? Los métodos para la suplementación directa de glutatión son problemáticos. Las investigaciones demuestran que la suplementación oral de glutatión (GSH) es inadecuada ya que las enzimas intestinales degradan al glutatión a medida que pasa por el tracto digestivo.
Existen otros métodos, como el glutatión intravenoso y nebulizado, que pueden tener un costo prohibitivo, muy elevado, para el paciente promedio.
Hasta la fecha, el medio más común y eficaz para mejorar el aumento de glutatión ha sido proporcionar al cuerpo precursores conocidos del glutatión.